jueves, 13 de agosto de 2009

Obispo de Veracruz atropelló a 6 personas es liberado

El obispo de la Diócesis de Córdoba en Veracruz, Eduardo Porfirio Patiño Leal, atropelló ésta mañana a seis personas, en el municipio de Huatusco.
Se le culpó de de homicidio culposo, por lo que alcanzó el beneficio de fianza, por lo que el Ministerio Público le fijó 90 mil pesos para que pudiera obtener su libertad.

Por la muerte de Marchela Colorado Velásquez, de 75 años, mujer indígena que se dedicaba a la venta de verduras en la vía pública, fueron pagados 37 mil pesos; mientras que por las cinco personas lesionadas se cubrieron 53 mil pesos.

Según el reporte policiaco, conducía una camioneta Nissan Panfhiter color plata, placas de circulación YDJ4565, del estado de Veracruz.

Debido a que manejaba a exceso de velocidad, perdió el control de la unidad y derribó un poste y se llevó a otro vehículo particular con placas de circulación XZE7706 y subió a la banqueta donde había varías vendedores ambulantes de verduras.

Al rendir su declaración, Patiño Leal explicó haberse sentido mareado, por lo que perdió el control de la unidad y provocó el accidente.

Un accidente nos puede pasar a cualquiera, pero no cualquiera maneja a alta velocidad en una zona de peatones y vendedores, fue muy IRRESPONSABLE al hacerlo, pero al parecer la justicia se acomoda según el personaje, pues no se aplicó el rigor de la ley.

Siendo ministro de la iglesia, debería de ser mas modesto pues trae un carro de lujo que vale la cantidad de $ 460,000 a $ 516,000 de pesos.

Queda evidenciado que la mayoría de los casos, los prelados de las iglesias NO son ejemplo de conducta responsable ni tienen prudencia, humildad.
¿Y los votos de probreza ?

11 comentarios:

Unknown dijo...

Noticias de Julio 20, 2009: El falso "estado de derecho" en México que hace poco celebró la adopción de la presunción de inocencia para todo acusado de delito, sólo la concede a políticos, militares, empresarios,religiosos y gente con conexiones o parentescos en Los Pinos, pero a cualquier otro ciudadano o persona sin esas relaciones se le presume culpable hasta que demuestre su inocencia ante un juez. Por eso se les decreta el inconstitucional "arraigo", una detención o privación de la libertad y derechos, mientras la PGR arma su acusación. Es el colmo de lo absurdo esto del tal "estado de derecho" si no fuera tan indignante, sería para llorar.

Ni mas, ni menos.
Saludos!

Diego dijo...

Hola, Minerva! Muchas gracias por tu lindo comentario de mi ilustracion! Nunca habia entrado a tu blog, y esta mas que interesante...lo visitaremos seguido! Saludos.

Bayo dijo...

Hola:

¡Buen auto!

Yo nunca voy a olvidar que, cuando me obligaron* a confirmarme en el colegio, hace como 15 años atrás, el obispo llego en un "Mercedes Benz" gris, nuevo.

Saludos.

Bayo

* Si no me confirmaba me echaban del colegio.

Bayo dijo...

Hola denuevo:

Con respecto a que lo dejaron libre, no me extraña. Los curas, los políticos, los empresarios y otros por el estilo, son tratados como ciudadanos diferentes al resto. Por ejemplo, acá en mi país, los candidatos presidenciales están empapelando las calle con publicidad y todavía no empiece el periodo legal para hacerlo, y lo hacen tranquilamente.

Saludos.

Bayo

La.. dijo...

Yo en mi linea, lo colgaba de las pelotas.
No puedo con la impunidad con la que se les ha tratado hasta ahora. Menos mal , por lo menos en España que ahora empiezan a caer como moscas por casos de pederastia, violaciones y doscientas mil cosas mas..
Un abrazo Minerva
Maria

Minerva dijo...

Hola, gracias por sus comentarios:
Noolzitha, muy acerdado tu comentario, por eso el decir que se aplica la ley según la persona y su posición económica. Un saludo.

Diego, es un placer visitar tu blog, saludos.

Bayo, somos de países diferentes, pero veo lo común que tienen México y Chile en la forma de impartir justicia y como se conducen los prelados de la iglesia y los que detentan el poder. En lo de tu confirmación creo que todos pasamos por ahí, tuvimos que seguir las normas de la religión que nos legaron nuestros ancestros, pero podemos romper con eso, creo que nos corresponde hacerlo. Un Abrazo.

María , hola, si que molesta ¿verdad? Que bien que en España ya se den casos en que se aplique la ley sobre ellos, no debe de haber favoritos de la justicia en NINGUN LUGAR DEL MUNDO. Un Abrazo.

Pablo Hernández Pérez dijo...

¿Por qué Dios no lo evitó si es omnipotente? ¿Por qué permitió, además, que el responsable fuera uno de sus representantes? ¿Por qué este representante de Dios conducía un coche de alta gama? ¿Por qué los feligreses que escuchan sus sermones no se dan cuenta de que hay algo que no encaja? uuhhmmm....

Un saludo, y buen blog.

Pablo Hernández Pérez dijo...

Por cierto, a colación de tu lema "saber, no creer", te gustará saber que la esposa de Carl Sagan (el famoso escéptico y cientifico) a la muerte e su marido, respondió a un periodista de la siguiente manera: "Carl nunca quiso creer. Él quería saber...". Genial.

Minerva dijo...

Hola Pablo, no había tenido la oportunidad de revisar mi blog a fondo por la contingencia, pero me halaga el comentario que me dices sobre la esposa de Carl Sagan.
Cuando pensé que poner en el lema al Blog, me dije a mi misma esto:
¿Creer para que? Prefiero el saber. Por eso le puse así. Un abrazo y gracias por adherirte a mi blog.

Anónimo dijo...

lo asqueroso del asunto,es que seguro estoy de que no solo las leyes dejan de aplicarse con el mismo rigor,que se hubiera aplicado en caso de que la vendedora matara al cura,pienso que la misma hubiera sido linchada por la gente que corrio de inmediato para preguntarle al cura¿esta bien?,el nivel de enajenacion de las masas sigue siendo tan aberrante como creer que dios (en caso de que exista)tiene algo relevante que hacer en nuestras vidas...

Minerva dijo...

Si Micael, se manejan privilegios para éstas personas, la cuales a sabiendas se aprovechan de ello. Lo que mas me inquietó es que mucha gente defendió al cura, justificándolo de que estaba distraido. Así está la enagenación de las masas. Saludos y gracias por comentar.